Una fecha para generar conciencia y sensibilizar a toda la sociedad sobre esta enfermedad que es considerada la principal causa de demencia
“Cada tres segundos, alguien desarrolla demencia en el mundo”, así lo señala la OMS (Organización Mundial de la Salud). Se estima que cerca de 50 millones de personas conviven con la patología y se espera que se duplique en apenas 20 años.
Según explica ALMA (Asociación Lucha contra el mal de Alzheimer) de Argentina, el Alzheimer “es una enfermedad que conlleva la declinación de las habilidades cognitivas y la capacidad funcional, junto a la aparición de síntomas conductuales y psicológicos. Aunque ha sido considerada generalmente como un trastorno casi exclusivamente cognitivo, la mayoría de las personas que la padecen desarrollan síntomas neuropsiquiátricos en algún momento de su evolución”.
Cada 21 de septiembre, en el mundo se desarrollan diferentes tipos de actividades para reflexionar y brindar información que mejore la calidad de vida de las personas que padecen la enfermedad y de quienes integran su núcleo familiar más cercano. “Tanto la demencia, los trastornos cognitivos como la enfermedad de Alzheimer son trastornos multifactoriales para los cuales resulta necesario un abordaje multidisciplinar”, resalta ALMA.
Asimismo, es importante que los estados y sus gobiernos participen concretamente en la generación de políticas públicas y acciones a favor de las personas con enfermedades de demencia y sus familias. En este sentido, el Gobierno Vasco elaboró “Euskadi Lagunkoia – Guía para una vivienda amigable con las demencias”, un proyecto del Departamento de Empleo y Políticas Sociales para brindar información precisa y pertinente en la que destaca: “las claves para el cuidado en casa residen en adaptar el entorno para que sea funcional sin convertirlo en un hospital de campaña, mantener el aspecto hogareño y los recuerdos controlando los riesgos y, quizás lo más difícil, cambiar nuestras ideas y comportamiento sobre cómo era la persona antes de tener demencia y cómo debería actuar, porque la persona que conocíamos puede estar cambiando su manera de pensar para adaptarse a un mundo cada vez más difícil de entender”.
Les compartimos aquí el archivo completo: Guía para una vivienda amigable con las demencias