PAMI elaboró una serie de recomendaciones para trabajadoras/es y personas mayores residentes
La pandemia y el contexto de aislamiento genera miedo, angustia y ansiedad. Los y las profesionales de las residencias de larga estadía para personas mayores deben prestar atención a los comportamientos de residentes y también a las reacciones propias. El estado de alerta permanente y el stress pueden generar actitudes violentas que se deben evitar.
En este contexto particular, el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI), bajo la dirección ejecutiva de Luana Volnovich, recomienda:
1. Propiciar un clima institucional cálido y alegre, que favorezca el bienestar y buen ánimo de las personas residentes.
2. Mantener el mayor nivel de actividad social y de interacciones entre residentes y personal.
3. No reducir ni suspender la actividad física.
4. Promover actividades de entretenimiento habituales y otras excepcionales que compensen las limitaciones que existen con los contactos externos.
5. Promover la reflexión en grupos, buscando aminorar los temores.
6. Prestar atención a los cambios conductuales en residentes con demencias, quienes perciben el clima de tensión generado por la situación actual pero, al no poder verbalizarlo, puede derivar en alteraciones.
7. Evitar el aislamiento de las personas con deterioro cognitivo y demencias ya que pueden incrementar la ansiedad y las alteraciones conductuales.
8. Es importante desarrollar estrategias positivas y amables, repitiendo tantas veces como sea necesario los procedimientos higiénicos, ya que es normal que las personas con demencias los olviden.
9. Promover el contacto telefónico u otros dispositivos -como Skype oWhatsApp- a fin de poder establecer comunicación a distancia con los familiares o las personas que habitualmente hacen las visitas.
