Tras un informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), la ONU (Organización de las Naciones Unidas) advierte que “existe una epidemia oculta” que debe ser atendida y estudiada
La pandemia generada por el COVID-19 ha venido manifestando diversas consecuencias complejas y preocupantes. Entre ellas, la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) señaló en su Informe 2020 que “el consumo de drogas y las muertes relacionadas con ellas se han incrementado entre las personas mayores, al igual que la cantidad de individuos en tratamiento por ese problema de salud”.
Dicho incremento es una clara alerta para las autoridades sanitarias que tienen la responsabilidad de reconocer la realidad presente en la vida de las personas mayores, plantea el Informe y al mismo tiempo recomienda “aceptar la existencia de esa esta epidemia oculta y atender a este grupo de población, que a menudo se pasa por alto, garantizándoles el acceso a los servicios de salud y bienestar necesarios”.
Como punto destacable, la JIFE marca uno de los prejuicios sociales y es que usualmente las personas mayores son ignoradas como consumidoras de drogas y estupefacientes. Sin embargo, es imprescindible que se lleven a cabo investigaciones y tratamientos destinados a este grupo porque sin datos específicos no se podrán diseñar las estrategias adecuadas para afrontar esta problemática.
En particular, “la información de Estados Unidos y Europa sugiere que el aumento del abuso de sustancias en este grupo etario se produjo principalmente en países de ingresos altos y podría resultar del envejecimiento de la generación de los “baby-boomers”, nacida entre 1946 y1964”.
Por su parte, explicita el Informe, en la última década en América Latina aumentó el consumo de las drogas sintéticas y las nuevas sustancias psicoactivas merecen el mismo nivel de seguimiento y vigilancia que el cannabis, la cocaína y otros narcóticos sometidos a fiscalización internacional.
Asimismo, este importante aporte brinda en su capítulo IV una serie de recomendaciones para los Gobiernos, las organizaciones internacionales y regionales y la sociedad civil, elaboradas desde un enfoque de derechos humanos.
Les compartimos el documento completo: Informe 2020 publicado por la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes
